Situada a 40 km de la ciudad de Buenos Aires, sobre un lote de 5000 mt2 en el Barrio La Isla de Nordelta, se implanta esta vivienda, diseñada para un coleccionista de arte contemporáneo.

Sobre un eje troncal, una secuencia de funciones ordena el uso de los espacios exteriores, a través de un jardín, un patio de escultura, pileta de natación, cancha de tenis de césped y un muelle náutico. La planta central en forma de U, definida por dos grandes galerías y un patio central para albergar arte, conforman el esquema funcional de la casa, otorgándoles a los padres y los hijos áreas bien definidas para su privacidad diaria, con un área de servicio haciendo de pívot entre ambos.

La búsqueda de un balance entre el espacio doméstico y el espacio museológico determinan la escala de la casa, y sus relaciones con el exterior. El patio concebido para el comisionado de una escultura, en relación directa con el recorrido de las galerías; un espacio que permita el desarrollo de una obra de gran formato, contemplada desde un ámbito familiar. Un largo muro de piedra adosado a la casa principal en dirección al lago incorpora las funciones complementarias (parrilla, chimenea, ducha exterior y salas de máquinas) rematando en una casa de pileta, con un programa de spa.

Construida completamente en hormigón visto de tablas machimbradas, planos de piedra de las sierras de Balcarce y parasoles revestidos en lapacho misionero, definen el lenguaje arquitectónico.

Escultura: Matias Duville - Fotos: Javier Agustín Rojas